Córdoba demolió 44-8 a Rosario en el inicio de su defensa del título argentino. Mostró un gran nivel e individualidades desequilibrantes. Sus puntos fuertes: defensa, presión y contundencia.
Aplausos. Bajan los aplausos, generosos y justos, al final del juego desde las tribunas de Córdoba Athletic. Córdoba acaba de pasar por encima a Rosario con una actuación contundente y sólida, y la gente se lo reconoce.
Una actuación de campeón. Si ésta es la tendencia, sobran razones para creer que el seleccionado cordobés puede repetir el título argentino. Y si no lo logra, pero mantiene la actitud, aptitud y concentración de ayer, el resultado final será, al fin y al cabo, una contingencia.
Pero no nos adelantemos. Vale la pena detenerse en lo que ofreció ayer en su debut el equipo rojo. Una máquina que se puso a andar en el inicio mismo del juego. Dos tries en los primeros 12 minutos tumban a cualquiera.Pero si uno de ellos es de scrum, ni hablar. Eso sucedió. Rosario, que se había plantado para dar una batalla, muy pronto se dio cuenta de que estaba frente a una misión imposible.
Veamos. Nueve minutos. Revol (¡qué jugador!) captura una pelota difícil en el aire e inventa. Gana terreno, usa el pie y corre rumbo al primer try. Un rosarino anula y acaso haya sido peor el remedio que la enfermedad. Scrum en los últimos cinco metros y los forwards cordobeses se comen crudo a sus rivales. Try penal y el principio del fin para Rosario. El principio, también, de una labor descomunal de los forwards cordobeses.
Tres minutos después, Cortez, de gran trabajo, aguantó una pelota en mitad de campo y alumbró un pasamanos de los backs que terminó en una corrida fenomenal de Barrea por la banda izquierda. Aplausos.
Un penal de Pez clavó un 20-0 en la mitad del período. Justo cuando el árbitro mendocino ordenó un tiempo muerto para refrescarse, que sonó a alivio para los rosarinos.
El segundo try de Barrea, otra corrida electrizante 11 minutos después, estiró la diferencia y selló el destino del juego. Más aplausos.
Defensa y presión
Tras el descanso, Rosario intentó jugarse el resto. Tuvo la pelota, atacó, pero se estrelló contra una muralla roja. La defensa, la actitud para presionar en cada metro del campo, sea acaso la cualidad que distingue a este equipo. Es tal su entrega, que por momentos emociona.
Córdoba aguantó el intento rosarino y cuando pudo, a los 14 minutos, regaló a su gente un try de antología. Una tremenda jugada que pasó por una decena de manos hasta la irrupción de Boaglio en el in goal visitante. Sí, aplausos. Más aplausos.
Luego, la sucesión de cambios desordenó un poco el juego, pero siempre fue todo del campeón. Incluso la última jugada. Bruno (¡qué jugador!) se quitó de encima un rosarino como si nada y en el suspiro final del juego corrió media cancha para apoyar el último try del partido. Tsunami de aplausos. La función terminó.
Síntesis
Córdoba 44: María (c), Fortuna y Cortez; Lobato y Schierano; Panessi, Basile y Bruno; Otero y Pez; Gómez López, Simó, Boaglio, Barrea y Revol. E: Rotondo-Tobal-Rodríguez Araya-Taleb.
Rosario 8: Sodini, Manavella y Negrotto; Bouza (c) y González; Dellavedova, Schiavo y Basso; P. Escalante y M. Escalante; J. Imhoff, Fradua, Amelong, Cáccamo y Carrió. E: R. Imhoff-Minoldo.
PT: 4m penal de Pez (C), 9m y 12m tries penal y de Barrea convertidos por Pez (C), 21m penal de Pez (C), 29m penal de M. Escalante (R), 31m try de Barrea (C), 36m try de Sodini (R), 41m penal de Pez (C). Parcial: 28-8. ST: 14m try de Boaglio (C), 21m y 39 penales de Pez (C), 44m try de Bruno (C).
Cambios en Córdoba: Panceyra Garrido por Lobato, Leonelli por Barrea, Cottonaro por Panessi, Menta por Cortez, Cuenca por María, Maineri por Otero y Bobadilla por Simó.
Cambios en Rosario: Taborda por González, Moliné por P. Escalante, Massara por Negrotto, Cúneo por Cáccamo, Gattarello por Amelong y Alderete por Manavella.
Amonestados: PT, 6m Schierano (C) y González (R). ST, 35m Gattarello (R).
Árbitro: Claudio Antonio (Mendoza).
Cancha: Córdoba Athletic.
Fuente: La voz del interior - Victor Cuello
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